LONDRES – Siempre es una hazaña superar las competitivas clasificaciones de un Grand Slam, pero más se disfrutan cuando se hacen al método Tomás Barrios: «Si te contara cómo llegué, te reirías».

A Londres, el chileno llegó sin minutos sobre césped tras jugar la final del Challenger de Poznan el sábado sobre arcilla. Pasó la noche viajado y sólo tuvo el domingo para prepararse en césped antes de arrancar su semana exitosa.

¿Debutar en una pista «chica» contra un rival de tercer o cuarto orden, o quedar con un top en la pista Central frente a todos los flashes? Barrios no dudó. «¿Cuántos partidos ha perdido Djokovic en la Central? Eso es un muy mal sorteo. Prefiero tener más chances con alguien de más bajo ranking, y después con más ritmo jugar contra un top», dijo el chileno Tomás Barrios a CLAY en Roehampton, el club donde se jugó la fase previa. El azar lo emparejó con el argentino Sebastián Báez en la primera ronda de este lunes.

Su deseo podría cumplirse en caso de dar la sorpresa y bajar a Báez: Nick Kyrgios, finalista en 2022, juega contra David Goffin en la llave colindante.

El tenista de 25 años se convirtió este jueves en el único sudamericano en superar la qualy, luego de vencer al brasileño Thiago Seyboth Wild por 6-4, 6-7 (3-7), 2-6, 6-3 y 6-2. «Estoy súper feliz, fue una semana muy dura. Contra Seyboth Wild fue partido muy duro, muy largo, muy mental. Pasé por muchos momentos distintos. Estoy muy contento de estar en un Grand Slam de nuevo», afirmó a CLAY Tomás Barrios.

– Segunda vez en Wimbledon tras pasar la qualy. En su caso, el pasto no es para las vacas.

– ¡Fue increíble cómo se dio! La semana pasada terminé jugando final en arcilla y llegué muy encima acá. Te reirías si te contara.

– Cuénteme.

– El sábado perdí (la final del Challenger de Poznan ante el argentino Mariano Navone). Viajé en bus a Berlín por la noche. Llegué a las 3.30 de la mañana, ya era domingo. Salió mi vuelo de Berlín a Londres unas horas después. Llegué a Londres a la una y entrené muerto esa tarde. Me tocó jugar al otro día, sin ritmo en pasto, sin preparar la superficie. Fue una semana muy linda, sobre todo por cómo se dio. Ahora necesito descansar, tengo varios días.

– Por suerte el césped le viene bien.

– Sí, por mi tipo de juego me ayuda bastante. El año pasado lo preparé tres semanas, perdí en primeras rondas. Este año no lo preparé nada y terminé pasando la qualy.

– ¿Y por qué teniendo un torneo como Wimbledon en frente, decide jugar torneos en arcilla?

– Traté de jugar en Queens y Halle, pero quedé fuera de las listas de qualy. Tendría que haber viajado y jugármela a que se bajara gente. Yo estaba jugando en Bratislava en arcilla, porque quería ritmo y puntos, no jugaba hace tres semanas antes de eso. Y si hacía cuartos, no iba a llegar. Me la jugué por buscar los puntos.

– Los tenistas de su ranking siempre sufren con la incertidumbre de no saber dónde van a jugar la siguiente semana.

– Dependemos mucho de las listas, si hubiera entrado directo seguramente hubiera jugado en pasto. Pero hubo que optar por arcilla. Ya mejoré el ranking y por suerte podemos ir cada vez organizando mejor.

– ¿Qué es un buen sorteo en un Grand Slam? Algún jugador con peor ranking que usted en una pista de tercer orden, o jugar en la pista Central con alguno de los favoritos?

– Prefiero alguien con ranking parecido, para poder llegar con un partido encima. Y luego quizás jugar contra algún favorito en la Central. Pero es que eso que dicen, que tocó un lindo partido porque te toca jugar contra Djokovic en la Central… ¿Cuántos partidos ha perdido Djokovic ahí?

– Está invicto desde 2013.

– Claro. Y nunca perdió en primera ronda. Entonces eso no es un buen sorteo a pesar de que todos te dicen “ay, qué lindo”.

– Entonces, mejor ganar un partido en una cancha chica que perder dignamente en una cancha grande.

– Exacto.

– ¿Qué le falta como tenista para meterse en el top 100?

– No jugué nada del segundo semestre de 2022. Si hubiese jugado ahí estaría top 100, probablemente. Estoy sacando mejor, me muevo mejor. Mi juego está mejor. Y lo más importante es que estoy más tranquilo en la cancha. Hoy estuve dos sets a uno abajo, tuve un break point en contra, y seguía tranquilo. También seguir siendo agresivo me ayudará a seguir subiendo en el ranking.

– ¿Existe una suerte de inspiración en usted por lo que ha hecho Nicolás Jarry después de volver de su suspensión?

– Sí, increíble. Cuando ya se metió cerca de los 100, todos sabíamos que se iba a meter mucho más arriba. Es muy incómodo jugar con él porque no te da ritmo. Me pone feliz de cómo le ha ido. Nos ayuda que esté así a todo el equipo de Copa Davis.

– Todo aquel que nunca lo vio jugar antes, se sorprende mucho con su drop shot. ¿Cuál es la historia de esa tomada tan poco ortodoxa?

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Nota de la redacción: para ejecutar el drop shot con el drive, Barrios coge la raqueta desde la garganta. Del lado del revés, lo hace de manera corriente.

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– Lo hago desde los diez años. Supongo que porque tenía poca fuerza. Se me hace más cómodo, no puedo tirar el drop agarrando la raqueta desde abajo. Luego la suelto y recupero bien la otra tomada para volear. Pero no es algo que se lo enseñaría a alguien.

– ¿Jugará los Panamericanos de Santiago en octubre?

– Voy a estar en los Panamericanos. Firmado. Una lesión sería lo único que me sacaría.

– ¿Y a Cristian Garín cómo lo ve?

– Venía jugando muy buen tenis. Estaba en buena racha y se lesionó en un muy mal momento. Si ganaba un partido más en Roma aseguraba main draw en Wimbledon, pero mala suerte. He hablado con él, sí. En Paris salimos a comer un día, estaba obviamente achacado porque se tuvo que borrar de Roland Garros. Está bajoneado, lo que es normal. Pero se va a recuperar. Se conoce muy bien con el Gringo (Andrés Schneiter, su entrenador).

– Cómo es su relación con los ex tenistas chilenos? ¿Qué tal se lleva con Marcelo Ríos, Nicolás Massú y Fernando González?

– Con el Chino no hablé más desde que salió de Copa Davis (Ríos era el ayudante técnico de Massú). El Feña se lleva bien con mi entrenador, a veces lo veo. Y con el Nico hablo bastante. Antes de irme a Bratislava nos fue a ver a un entrenamiento con Ale (Tabilo). Estamos en constante comunicación. Ojalá que vuelva al circuito.

– ¿Y cómo fue trabajar con Marcelo Ríos en el equipo de Copa Davis?

– Es una persona muy especial. Te da tips que te ayudan mucho. Tiene un carácter que no es fácil dentro de la cancha. No compartí mucho con él, porque yo no jugaba los singles, él estaba con los titulares.

– En una entrevista en Punto de Break el 2021 decía que su sueño era vivir del tenis. ¿Logró cumplirlo?

– Yo creo que estoy empezando a vivir del tenis. No es fácil estando 140. Son muchos gastos. Yo viajo todas las semanas con entrenador y fisio. Pero estoy mejor económicamente que cuando di esa entrevista. Ojalá estar top 50-top 60, porque ahí cambia el panorama.

– ¿Esos malabares económicos cómo se hacen?

– Ya me puedo pagar la carrera yo solo. Al principio era muy difícil. De los 18 a los 23 fue muy difícil, perdía plata. Ahí me ayudó mucho mi papá.

– Qué cosas lo sacan de la rutina en los torneos?

– Me gusta mucho salir a comer. Me encanta el asado. Me gusta conocer los lugares, aunque eso queda más para las veces que pierde en las primeras rondas. Antes me costaba mucho viajar, estar tanto tiempo afuera, porque me gusta mucho estar con mis amigos y mi familia. Ahora ya estoy más tranquilo.

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