Federer no fue un tenista “entretenido”. ¿Quién lo dice? Marcelo Ríos
SANTIAGO, Chile – Roger Federer no. Nick Kyrgios sí. El concepto de entretención en el tenis para Marcelo Ríos radica en personalidades del presente similares a como era la suya en las pistas del pasado: “Federer para mí no es un jugador que tú lo veas y llame la atención y digas ‘qué entretenido’. Me gusta como juega porque es un tipo con una facilidad increíble, muy inteligente en la cancha, buenísimo. Pero no es un Kyrgios, un Fognini que lo ves y estás esperando la puteada, que deje la cagada (que cause polémica). Eso es más entretenido”.
“A Djokovic tampoco lo encuentro un tipo entretenido en la cancha”, dijo el ex número uno del mundo en conversación con el periodista Ricardo Shannon de ESPN.
“El tenis siempre ha tenido restricciones. Si dices un garabato, multa; si tiras la raqueta, multa. En las conferencias de prensa no podías hablar mal de nadie. Wimbledon vestidos de blanco parecen cualquier hueá (cosa). El tenis es fome (aburrido), es como ir a ver cricket. Entonces sale un tipo como Kyrgios y deja la cagada. Llena canchas, es un espectáculo. Mi manera de ser también fue un poco errada. Yo llamaba mucho la atención tirando raquetas, o el “vieja culiá”. A la gente le entretenía”, reflexionó el chileno en la entrevista transmitida en el programa FShow.
Escribe el periodista Nelson Flores en su libro «El extraño del Pelo Largo», que en Indian Wells 1997, Ríos olvidó su ropa en la lavandería del torneo californiano, lo que notó recién en el hotel.
Luego se encontró casualmente con Eller Evans, supervisor del ATP de entonces, y lo primero que hizo fue preguntarle por sus prendas. Evans le respondió que tenía la ropa limpia en su habitación, que podía entregársela más tarde. Ríos insistió en que la necesitaba inmediatamente.
«Podrías primero saludar y dar las gracias», respondió Evans. «Quédate con ellas, entonces», replicó Ríos, antes de dejar a Evans hablando solo. Por la tarde, el chileno encontró su ropa flotando en el jacuzzi del club.
Al año siguiente de ese episodio, sería campeón. Ríos revive esas imágenes de hace 25 años, cuando venció a Greg Rusedski en la final de Indian Wells 1998. “¡Puta que estaba chico”, exclamó cuando se vio con 22 años en el celular de Shannon. Dos semanas después vencería a André Agassi en la final de Miami para sacar a Pete Sampras del número uno.
«Te regalaban un Mercedes. Me fui al hotel y cuando llegué a la pieza, llené la tina con cerveza. Estaba solo, me puse a tomar cerveza. Llegó mi papá y me dijo ‘¿Sabes lo que acabas de hacer, o no? Eres número uno del mundo’. Con esta cuestión caían millones de Nike, de Yonex», recordó en el programa Zoom.
Uno de los desafíos más difíciles del tenis. Ganar el Sunshine Double en una misma temporada significa encadenar una racha de al menos doce triunfos en los dos torneos más largos y exigentes del calendario después de los Grand Slams: “Ni siquiera sé como lo hice. Ganar durante tres semanas, aparte queda número uno, aparte ganando a Agassi, aparte quitando del liderato a Sampras. Tengo recuerdos, pero no vivo del pasado, tampoco es que sea mala agradecido y no me importe”.
“Hablando con Hernán Gumy (ex tenista argentino), me tiró 50 tipos que jugaban bien en mi época. Sampras, Courier, Agassi, Chang, Muster, los suecos. Hoy en día tienes a los super 4 que habían y de repente ves tipos 20 que no conocís. El tenis antes era muy competitivo, con tipos muy buenos”, afirmó.
Rios volvió a Chile (reside en Sarasota Florida, Estados Unidos) para disputar una exhibición con el español Álex Corretja. No fue precisamente para celebrar un cuarto de siglo sobre su hazaña en el cemento estadounidense. Era sólo una partido amistoso que tenían pendiente y que no se pudo realizar gracias a la pandemia y a las lesiones en la espalda del chileno.
Mismos problemas físicos que no lo dejaron disputar otra exhibición que ya tenía agendada precisamente con Nick Kyrgios. “Nosotros estábamos listos. Nick iba a jugar, pero fue Marcelo quién se bajó por su espalda”, dijo a CLAY Daniel Horsefall, manager del australiano.
Alex Corretja y Marcelo Ríos antes de la exhibición que jugaron en Santiago // AGENCIA UNO
Para jugar con el español, el campeón de cinco Masters 1000 tuvo que darle un giro a la rutina que llevaba en el gimnasio y que lo tenía luciendo como un físico culturista. Pesaba casi 100 kilos. Bajó 12.
Durante su tiempo en Chile, no pudo ver por televisión la edición 2023 del torneo del desierto californiano que acabó ganando Carlos Alcaraz: “¿Me vas a creer que no he visto nada porque la casa que arrendé no tiene internet? La vieja se cagó (fue tacaña) y no puso internet”.
El “Chino” y el chino no se entendieron
Marcelo Rios tuvo una breve experiencia como entrenador en el circuito profesional. El chileno guió a Juncheng Shang por un par de meses en 2022. El chino ganó dos Challengers con el “Chino” a su lado.
“Me llamaba la atención lo que hizo (Juan Carlos) Ferrero con Alcaraz. Además que Shang es parecido a mí, es zurdo. Y era el único jugador de Challengers que tenía un ex número uno del mundo con él”, dijo en ESPN.
Rios, Federer y Ferrero durante el homenaje de la ATP a los números uno // ATP
Pero el chileno fue despedido. Luego, Shang en entrevista con CLAY se refirió al chileno como “irrespetuoso”.
“Pero si el chino estaba feliz. Es otra cultura. El sudamericano se saca la cresta (trabaja duro). Yo quería entrenar después de los partidos y ellos no. Si le dolía la pierna, paramos. Aparte que viven bien, tienen plata, auspiciadores por todos lados. Le dije que así no iba a llegar a ningún lado. Si ves a Alcaraz, él se mata. Le mandé videos de Nadal que me mandó Moya. Cuando se empiezan a meter los papás, es imposible”.
¿Volvería Marcelo Rios al circuito como entrenador? “No. No entrenaría a nadie más, aunque si me llama Federer no le podría decir que no. Hasta le cuido la guagua (a los hijos)”.
