PARÍS – Cuando Carlos Alcaraz ganó el Abierto de Estados Unidos 2022 una nueva era del tenis nacía sin que la anterior hubiera muerto aún, pero con Alcaraz o Jannik Siner en la final del Abierto de Francia este domingo, la nueva era del tenis habrá comenzado definitivamente.
Será Alcaraz o será Sinner el que se enfrente a Alexander Zverev o Casper Ruud en la definición, pero el gran dato, enorme dato de esa final es que no estarán ni Rafael Nadal, ni Novak Djokovic ni Roger Federer. Hay que remontarse a 2004, con la final entre los argentinos Gastón Gaudio y Guillermo Coria, para ver algo igual: ningún integrate del «big three» en la definición de Roland Garros.
Pero hay cosas que permanecen, frases que suenan a aquellos veinte años dorados del tenis masculino.
«Yo estoy agradecido de tener a Jannik en el circuito, de tenerlo ahí, porque al final gracias a él me hace ser mejor jugador, me hace levantarme por la mañana, querer mejorar, querer entrenar para intentar subir mi nivel para vencerlo», dijo Alcaraz tras avanzar a semifinales.
«Para estar ahí peleando por grandes cosas con él. Yo creo que, como he dicho también, cuando salió el cuadro, creo que todo el mundo quería esa semifinal entre Jannik y yo».
Se puede cambiar «Jannik» y «Carlos» por «Roger» y «Rafael» y no sonaría en absoluto extraño: lo que dice el español es muy parecido a lo que Nadal y Federer decían el uno del otro.
Es más: Alcaraz y Sinner están recibiendo ya aquellos elogios de estilo hiperbólico a los que estaban acostumbrados Nadal y Federer.
De Mats Wilander, por ejemplo. El sueco, ex número uno del mundo y actual comentarista de Eurosport, dice que los cuartos de final del US Open 2022 entre Alcaraz y Sinner es el mejor partido de tenis que ha visto en su vida. Y vio mucho, muchísimo Wilander.
El balance de enfrentamientos personales entre el italiano, nuevo número uno del mundo desde este lunes, y Alcaraz, está empatado en cuatro. «Y yo tengo ganas de que esté a mi favor», dijo el español con sonrisa de oreja a oreja.
El de Zverev y Ruud también está empatado, en este caso un 2-2, con el antecedente muy cercano de un 6-3, 6-4 y 6-0 del noruego sobre el alemán en la semifinal de Roland Garros 2023, la misma instancia que los medirá este sábado.