PARÍS – La receta del argentino Horacio Zeballos para llegar a su primera final de dobles en Roland Garros fue fantasear con la Copa Davis.
«Voy a ser honesto, en las semis, cuando el público alentaba a nuestros rivales y se escuchaban los gritos desde las tribunas, intenté imaginar que estaba jugando Copa Davis. Ahí me sale el león que tengo dentro, pienso que represento a Argentina y doy lo mejor de mí. ‘Actitud de Copa Davis, actitud de Copa Davis’, me decía», reveló a CLAY y RG Media en París.
El zurdo, haciendo dupla con el español Marcel Granollers, venía de fallar tres veces en el intento. Juntos cayeron en las semis de 2022, 2023 y 2024. Zeballos confesó que era una cuestión que le daba vueltas en la cabeza.
«Teníamos la espina clavada con Roland Garros. Queríamos realmente ganar. Estoy muy, pero muy contento, porque es un objetivo nuevo cumplido. Ha sido una batalla más interior para tratar de sobrevivir en esta jungla que es este deporte», afirmó Zeballos, uno de los pocos tenistas que supo ganarle en individuales una final sobre arcilla a Rafael Nadal.

Luego de vencer al francés Edouard Roger-Vasselin y al monegasco Hugo Nys, Zeballos expuso a CLAY el trabajo mental que han hecho para conseguir una meta pendiente.
«Estamos haciendo un trabajo psicológico fuerte para tratar de poder superar este tipo de presiones. Si me decías que por el resto de mi carrera llegaría solo a semifinales, te lo firmo. Pero luego quieres un poquito más después de la segunda, tercera vez. Entonces eso termina jugando un poquito en contra, termina siendo un peso extra que demanda muchísimo esfuerzo mental y mucho trabajo de equipo», confesó el número 11 de la especialidad.
El hecho de haber vuelto al equipo de Copa Davis de Argentina es otra cosa que lo alivia. Tener un lugar para representar a su país le entregó un aire de frescura. El capitán Javier Frana lo nominó en febrero para la serie contra Noruega, después de haber sido excluido tanto en series pasadas, como en los Juegos Olímpicos de París 2024. Incluso siendo número uno del mundo.

«Representar a Argentina es algo muy lindo, ¿no? Este año la pasé bomba cuando pude volver al equipo y me dieron un lugar. No solamente como jugador, sino también como un consejero, una voz con más experiencia que ya vivió varias series. Los chicos estuvieron muy abiertos a oír mis opiniones. Fue algo muy emocionante», reconoció.
¿Cómo preparará el Argentino junto al español su primera final en la arcilla de París? Dos claves: la primera es disfrutar de un logro inédito en su carrera. La segunda, «creer mucho» en ellos mismos y en estar convencidos de que por fin podrán ganar su primer Grand Slam.