Ganar tu primer título ATP en el Masters 1000 de Miami a los 19 años tras negarle en la final el centésimo título al jugador más exitoso de la historia, tiene que estar reservado para jugadores diferentes. Jakub Mensik demostró ser uno de ellos.
El checo superó por 7-6 (4) y 7-6(4) a Novak Djokovic, su referente e ídolo, el deportista por el cuál juega al tenis.
«El primero de muchos», escribió en la cámara después de desplegar un tenis que ahogó a un Djokovic, sobre todo con el servicio. El seis veces campeón en Miami terminó muy cansado cuando ya daban cerca de las once de la noche en Miami, en un partido que comenzó con más de cinco horas de retraso por culpa de la lluvia.
Mensik sabe que puede respaldar la afirmación que plasmó con tinta naranja para la televisión. Su confianza está en el tope, y no tiene miedo a revelar sus grandes sueños en el tenis. Lo hizo con CLAY, en la semana previa al Masters 1000 de Miami, cuando se preparó en el Challenger 175 de República Dominicana: «¿Mi mayor ambición? Ser número uno y ganar todos los Grand Slams».
«Esta nueva generación está a punto de traer algo fresco al tenis. Es difícil decir exactamente qué nos caracteriza, ya que todos tenemos estilos diferentes. En mi opinión, hay un mayor énfasis en lo físico. Además, creo que podemos absorber mucho al jugar contra los mejores jugadores del mundo. Aprendemos mucho de eso. Así, algún día podremos estar a su nivel», analizó junto a CLAY.
Mensik es el mejor adolescente del ranking ATP y además de Joao Fonseca, son los llamados a liderar a su generación. Del checo, muy poco se ha hablado en comparación al brasileño, a pesar de mostrar mejores números que su rival. El propio Mensik comentó públicamente su opinión respecto a la diferencia de impacto mediático.
«Tal vez sea por el hecho de venir de República Checa, un país pequeño. Incluso aquí en Miami siento que estuviera en Sudamérica, todavía no he escuchado a nadie hablar inglés por la calle. Es genial ver cómo aterrizan nuevos nombres, estamos aquí para seguir los pasos de Jannik y Carlos y, al final, la atención recaerá en el que sea el mejor jugador del mundo», dijo.
El rey de los tiebreaks
Que Jakub Mensik vuelva a Europa con el trofeo de Miami, se explica en gran parte por su solidez en los tiebreaks.
El checo llegó siete veces al seis iguales en Florida y siempre ganó. Impresionante para un chico de 19 años. Su efectividad la sufrieron Jack Draper, Arthur Fils, Taylor Fritz y Djokovic.
Nunca tembló en momentos tensos, menos cuando Djokovic intentó intimidarlo.
Al inicio del primer desempate, una pelota de Mensik pegó en la faja. Djokovic llegó exigido, para que luego el checo devolviera, obligando al serbio ir a buscar la pelota en dirección a la línea de base.
Djokovic repelió con un globo que quedó corto, y Mensik definió con un espectacular smash de revés, para luego celebrar con el puño apretado.
El campeón de 24 Grand Slams le clavó una mirada desafiante, exigiendo las disculpas por haber cambiado accidentalmente la trayectoria de la bola. Mensik levantó las manos en señal de disculpa.