LONDRES – No es que se haya aburrido de Chile, pero después de una década viviendo ahí, casado y con dos hijos, ya le apetece un cambio.
Fernando González, 41 años, ex número cinco del mundo, prepara su desembarque en Miami, la ciudad donde se formó tenísticamente. Quiere el calor de Florida, pasar más tiempo con sus hijos y estar cerca del mundillo tenístico por si surgen chances como coach: «Me gusta la competencia, trabajar adentro, pero no quiero viajar a tiempo completo».
El cuartofinalista de Wimbledon en 2005, repasa con CLAY la actualidad del tenis mundial, cuyo tema inevitable es el regreso de Roger Federer a las pistas. «Volverá para hacer algo importante», dice quien enfrentó 13 veces al suizo en el circuito, con una victoria a su favor: «Será duro para él, no creo que pueda ganar un Grand Slam, pero en partidos a tres sets, hará cosas interesantes».
Está invitado por el All England Club para jugar el dobles de los veteranos. Se encuentra con los ex compañeros y revive las memorias. Relajado, en la terraza de los competidores, se entusiasma al comentar sobre las criptomonedas, explica por qué renunció al directorio de los Juegos Panamericanos Santiago 2023, y habla del plebiscito que se llevará a cabo en su país para decidir si se aprueba o no una nueva Constitución: «No revelo mi opción porque no tengo el ánimo de que me soben la espalda unos, ni que me critiquen otros».
– Venir a jugar invitado a Wimbledon, con el trato que da el All England Club no da para quejarse…
– Está súper bien. Volver a encontrarse con los amigos, los rivales, los jugadores que uno admiraba… volver a pisar estas canchas, las con más historia en todo el mundo, es muy entretenido. La onda es completamente distinta. Te cagas de la risa antes y durante el partido, compartes una cerveza. Obviamente quieres ganar, pero al final es un pequeño detalle. También se disfruta más la ciudad.
– En sus tiempos de profesional hasta llegó a tener un programa de viajes desde algunos de los sitios donde jugaba los torneos.
– Era acercar al tenis a la gente que le gustaban los viajes, y a los seguidores del tenis, enseñarle los lugares. El turismo agota cuando estas compitiendo, y hay que descansar, pero es importante tomarse alguna tarde para conocer. Ahora me voy todo el día a pasear. Esta vez fui de Little Venice a Camden Town, que es mi barrio preferido no sólo de Londres, sino que del mundo. Ha cambiado un poco, está excesivamente turístico, pero ver la diversidad de personas que puede haber en un lugar, eso siempre me ha gustado.
– ¿Qué significa para un tenista que no es Federer, Djokovic, ni Nadal, ser cuartofinalista de Wimbledon?
– Me hubiese encantado llegar más lejos. Fue súper importante porque no me lo esperaba. Las primeras veces que jugué acá me costó un montón. No llegaba bien preparado. En 2002 y 2003 llegué muy encima. En 2005 me vine acá después de Roland Garros.
– Usted es muy cercano a Cristian Garin, quien ahora igualó su registro en Wimbledon. ¿Cuánto le servirá a él esta campaña para su futuro?
– Todo le va sumando. Me gustó mucho lo que vi. Ganarle a alguien como De Miñaur en una superficie que no es tan familiar para ti como sí para él. Dos sets a cero abajo, un match point en contra… es algo importante. Obviamente que hay cosas para mejorar.
– ¿Qué cosas?
– Tratar de cerrar más los puntos en la red, elegir mejor la jugada correcta y hacer más cambios de velocidades, cosa que no se está haciendo mucho en el circuito. Él lo tiene claro. Está en buenas manos con Pepe (Vendrell), a quien no lo conocía mucho, pero tuvimos la oportunidad de hablar varias veces en Wimbledon. Eso de dar consejos a través de los medios… si me lo pregunta directamente él, le doy mi opinión. Hoy veo que casi todos los jugadores juegan a la misma altura y a la misma velocidad, hay pocos que hacen los cambios como Roger, Tsitsipas, o Thiem. Jugar rasante, por abajo, con slice, y también hacer el cambio de jugar alto. Garin podría hacerlo si se siente cómodo.
– Se dice que en Chile no hay canchas de césped, pero usted sí encontró una en su país cuando tuvo que preparar la gira sobre pasto.
– Existía una en Rapel (lago ubicado a dos horas al sur de Santiago). Era extraordinaria, no sé si existirá todavía. Me la ofreció el golfista Felipe Aguilar, porque era de un señor que además tenía una cancha de golf en la casa.
