PARÍS – Denme tiempo, pide Rafael Nadal. Y dejen de preguntarme todos los días acerca de mi retiro.
El 6-1 y 6-4 del serbio Novak Djokovic fue contundente, y Nadal no se engaña acerca de lo que significa su salida en la segunda ronda de los Juegos Olímpicos de París 2024. Ahora solo le queda el dobles junto a Carlos Alcaraz.
«Ha habido un jugador mucho mejor que el otro y hay que aceptarlo. Durante una hora ha sido duro de digerir todo lo que estaba pasando, aunque lo he hecho (…). No he sido capaz de jugar al nivel que necesitaba para crearle problemas, él tampoco me ha regalado prácticamente nada, ha estado bastante inspirado durante mucho rato».
«Tampoco tengo las piernas de hace 15 años, o sea que sin calidad de bola y sin las piernas de hace 15 años, no vas a crear problemas al mejor jugador de la historia».
Resuelto eso, la incógnita es el futuro de Nadal. Desde que una lesión impidió en julio de 2022 que disputara la semifinal de Wimbledon, el español casi no ha jugado. Él dice que ese es, precisamente, el problema: su tenis funciona, pero si no lo prueba con regularidad, falla.
«Aunque para muchos tenga poco sentido, llevo dos años sufriendo. La cadera, y he estado mucho tiempo de recuperación. Pero me voy sintiendo mejor físicamente. Evidentemente, si siento que no soy competitivo, si no tengo capacidad de ser competitivo, voy a tomar la decisión de irme. Pero he jugado poquito la verdad, he jugado muy poquitos torneos desde que me he operado la cadera. Una operación importante, que no es fácil de recuperar. Llevo un poquito más de un año desde la operación. La regeneración de todo eso no es tan rápida».
Visiblemente agotado de escuchar una y otra vez la misma pregunta, Nadal le pidió una tregua a los periodistas.
Nadal pide tiempo
«¡Parece que queréis retirarme!», se quejó.
«Yo intento hacer lo que puedo para intentar disfrutar y para darme la opción de ser competitivo. Si después de aquí no tengo más ganas de jugar, pues os lo comunicaré y ya está. Pero dejarme un poquito el día a día y elegir lo que tenga que hacer cuando lo tenga que hacer».
«Lo que tenga que decidir lo decidiré después de los Juegos. No puedo estar pensando todo el día eso. ¿Sabéis lo que pasa?, que vengo aquí y me preguntáis cada día lo mismo y al final, ¿sabéis lo que pasa? Que es muy difícil recuperar un nivel óptimo si estoy cada día pensando si me retiro o si no me retiro, ¿no? Con lo cual yo intento vivir mi día a día».