LONDRES – Las ironías del tenis. En una era dominada por Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic, la persona que acabó con la carrera de Andy Murray en Wimbledon fue… Emma Raducanu.
«Obviamente que Andy estaba decepcionado, pero yo tuve que priorizar mi cuerpo», explicó Raducanu a los medios. La decisión de la campeona del US Open 2021 de bajarse del dobles mixto dejó a Murray devastado, porque el ex número uno del mundo iba a disfrutar del que sería su último último partido en el All England Club.
Este jueves recibió una emotiva despedida en el Court Central tras caer en el dobles masculino junto a su hermano Jamie; el sábado le tocaba decir adiós al Court 1.

Ni él ni su círculo quisieron hablar públicamente sobre el tema, pero fue Judy Murray, su madre, la que demostró, con ironía, ese malestar en las redes sociales.
«Sí, asombroso (Yes, astonishing)», respondió Judy sobre un posteo en Twitter sobre la baja de Raducanu por molestias en la muñeca. La intención de la tenista de 21 años era no poner en riego su físico pensando en el singles, aunque la apuesta le trajo muchísimas críticas. Lulu Sun, la revelación del torneo proveniente de la qualy la eliminó con un 6-2, 5-7 y 6-2.
«No estoy segura si alguien entiende el sarcasmo por estos días», Judy volvió a tuitear después de la tormenta que generó en los medios. «Estoy segura que la programación jugó un desempeño importante en la toma de decisiones». Posteriormente cambió su cuenta a privada.

¿Más ironía? El sponsor de la neozelandesa Sun. En el encuentro contra Raducanu, la tenista de 23 años lució un parche en el pecho que decía «astonishing». Aprovechando la exposición que tendría en la Cancha Central, una compañía de limpieza de ese nombre le pagó por aparecer en su indumentaria.
«No vi la reacción de Judy, pero sea lo que haya dicho, estoy segura que no lo hizo con malas intenciones», dijo Raducanu en conferencia de prensa, con una sonrisa. La británica de ascendencia china y rumana aseguró que su decisión había sido la correcta después de haber aceptado la propuesta del All England y de Murray sin pensarlo dos veces: «No puedo decir que fue un error haber aceptado la invitación, porque me sentía muy bien físicamente y los dolores aparecieron después. Fue una decisión difícil. Yo no quería quitarle su último partido, pero tuve que priorizar».
Alcaraz, comprensivo
Tras pasar a los cuartos de final de Wimbledon, Carlos Alcaraz fue comprensivo con la británica.
«Estoy seguro que no era algo que quería hacer. Ella tenía sus razones, problemas físicos. Tenía por delante una cuarta ronda de Grand Slams en singles y estoy seguro que muchos jugadores en su posición habrían hecho lo mismo. Obviamente sabiendo que iba a ser el último partido de Andy Murray, era algo muy complicado de manejar», dijo Alcaraz.