Simona Halep, del Top 10 al borde del retiro, sin escalas
Wimbledon, 13 de julio de 2019. El drive de Serena Williams se estrellaba contra la red. Simona Halep caía de rodillas al suelo. Sus brazos en alto. Su mirada incrédula. El segundo Grand Slam en 2 años. El mundo del tenis a sus pies.
Cuando tenía 10 años, su madre le dijo que para ser alguien en el mundo del tenis tenía que jugar la final de Wimbledon. Esa tarde gloriosa en Londres, Simona emocionó a su familia y a todo un país. Entre quienes lloraron de alegría estuvo Virginia Ruzici, pionera rumana que en 1978 se coronó en Roland Garros. Las leyendas del tenis le daban la bienvenida al olimpo.
En la última década, Simona Halep fue una de las pocas jugadoras que logró sostenerse con consistencia en el Top 10. Lo hizo a base de un juego completo, cimentado en una actitud guerrera que la distinguía. Se movía por la cancha con un brío único. Su currículum incluye 24 títulos y batallas inolvidables contra las mejores de su generación.
Sin embargo, el partido más difícil de su vida lo está jugando ahora, a sus 32 años, por un control antidoping positivo.
El caso
La rumana llegaba al US Open 2022 en un gran momento: tras llegar a semifinales en Wimbledon, ganaba en Toronto y regresaba al Top 10. Su nivel crecía partido a partido, y los recuerdos de su época dorada (2018/2019) parecían más cercanos que nunca.
El tenis no la acompañó en el último Grand Slam del año y se despidió en primera ronda.
Los problemas llegaron con los resultados del test anti-doping: la Agencia Internacional para la Integridad del Tenis (ITIA) comunicó la aparición de Roxadustat en su prueba de orina. Tras una investigación en la cual Halep sostuvo su inocencia desde el primer momento. El organismo resolvió suspenderla por cuatro años, por incumplimiento del Programa Antidopaje del Tenis.
«El tribunal aceptó el argumento de Halep de que habían tomado un suplemento contaminado, pero determinó que el volumen que la jugadora ingirió no pudo haber resultado en la concentración de roxadustat encontrada en la muestra positiva», aseguraba el comunicado de la ITIA.
¿Qué es el Roxadustat y por qué es una sustancia prohibida?
El Roxadustat figura en la lista de sustancia prohibidas por la Agencia Mundial Antidopaje porque aumenta la producción endógena de eritropoietina y estimula la producción de hemoglobina y glóbulos rojos. En pocas palabras: mejora la oxigenación de la sangre, y por este motivo se considera que puede mejorar el rendimiento deportivo.
En este sentido, el caso de Halep tiene muchas similitudes con el de María Sharapova: la rusa dio positivo de meldonium en el Open de Australia 2016. En ambos casos, el medicamento favorece la oxigenación de la sangre. El Roxadustat se usa en el tratamiento de pacientes con enfermedad renal si desarrollan anemia. El Meldonium normaliza el metabolismo energético, de modo que las células no sufren por falta de oxígeno a causa del esfuerzo físico o del estrés y permiten que el deportista maximice su esfuerzo.
Sharapova recibió una suspensión de dos años. Tras apelar, logró la reducción a 15 meses. Regresó al circuito mediante invitaciones, desatando una lluvia de críticas de todo el mundo del tenis.
Paradójicamente, entre esas voces estaba la de Simona Halep, que decía: “Para los niños, para los tenistas jóvenes, no está bien beneficiar con un wild card a una jugadora que fue sancionada por dopaje. No se trata de Maria Sharapova, se trata de todos los jugadores que se han dopado.” Wozniacki, Kerber, e incluso jugadores como Murray y Tsonga se pronunciaron en el mismo sentido.
El centro de la cuestión estaba en la intención de sacar ventaja deportiva. Hacer trampa. No hay nada más sagrado en el entorno deportivo que el fair play, la igualdad de condiciones. Cuando ese pacto se quiebra, ya sea de manera voluntaria o involuntaria, el nombre del “acusado” queda manchado, para siempre. Por este motivo los casos de doping son tan delicados.
Simona Halep deberá esperar hasta febrero para ejercer su defensa en juicio ante el Tribunal de Arbitraje Deportivo. Su objetivo será probar que hubo contaminación, y por eso la cantidad de Roxadustat encontrada fue muy baja.
En una reciente entrevista con EuroNews, la rumana rompió silencio y reflexionó sobre su difícil presente:
“Ya ha pasado más de un año y cada día ha sido muy doloroso, emocional, perturbador, porque sé que no he hecho algo malo y sé que estoy limpia. Así que fue un shock para mí cuando recibí la carta de que mi análisis de orina, solo mi análisis de orina, dio positivo con una pequeña cantidad de una sustancia prohibida. Siempre he estado en contra del dopaje. He sido muy explícita al respecto, así que nunca en mi vida se me pasó por la cabeza hacer algo así.”
Posible retiro
La pregunta más difícil llegó al final. Era la pregunta obvia: si el Tribunal de Arbitraje se pronuncia en tu contra, ¿será el final de tu carrera?”
«Creo que sí, porque cuatro años va a ser mucho, para mi edad al menos. Y para una deportista que ha hecho esto todos los días durante 25 años y ha dedicado su vida al tenis y al deporte no sé cómo va a ser, pero es catastrófico si van a ser cuatro años, y no sé cómo lo voy a manejar. Probablemente, va a ser el final de mi carrera, sí. Y por algo que no he hecho y que no es culpa mía, es aún más catastrófico».
La guerrera rumana está abatida, pero no vencida. Su entorno y seguidores más fieles la mantienen de pie, para que luche por demostrar su inocencia. En tan solo unas semanas se sabrá el final de la película.
