De la caja de las curiosidades del tenis: en las manos de Carlos Alcaraz está definir si la carrera de Rafael Nadal llegó o no a su fin.
Este martes, el tenista de 38 años compitió posiblemente por última vez en una cancha de tenis.
Perdió por 6-4 y 6-4 contra Botic van de Zandschulp, y así, España liderada por Alcaraz, deberá dar vuelta la serie de los cuartos de final de Copa Davis frente a los Países Bajos para que Nadal tenga una nueva chance de saltar a una pista.
No debe haber sido sencillo para el holandés jugar contra uno de los mejores tenistas de todos los tiempos en su despedida, en un estadio en España con todo el público local. Van de Zandschulp evidenció los nervios al inicio del partido, cuando cometió tres doble faltas seguidas, pero de ahí en más, fue la versión del tenista que en Nueva York dio la sorpresa y eliminó a Alcaraz, sin baches con el servicio, y muy certero en la pista rápida de Málaga con golpes profundos y buenas voleas.
Demasiado para Nadal, que no gana un partido desde los Juegos Olímpicos de París 2024, y, en cancha dura cubierta, desde noviembre de 2022 (en las Finales ATP, gracias a la gentileza de Casper Ruud).
Right now at Place du Trocadéro, Paris#GraciasRafa ❤️💛 pic.twitter.com/E2Bg3DjHj5
— Bastien Fachan (@BastienFachan) November 19, 2024
Su presencia en el partido de individuales podrá ser interpretado por varios como un premio a la trayectoria del campeón de 22 Grand Slam. Y bien justificado por el contexto de su despedida: Nadal mostró su falta de ritmo y precisión, mientras que Roberto Bautista-Agut era uno más de los que lo apoyaba el borde de la cancha. Bautista ganó recientemente un título de un evento ATP en pista rápida bajo techo.
“No es decisión mía. Será decisión de David (Ferrer, el capitán). Quizá el movimiento fácil sea cambiarme por Roberto. Si yo fuese él, quizá me cambiaría. Así lo siento. Probablemente este haya sido mi último partido. Perdí mi primer partido en Davis y perdí el último”, dijo el ganador de 14 títulos de Roland Garros, entrevistado por la TV. Es posiblemente una opción para el dobles, si España avanza.
Al final del encuentro, Nadal levantó los brazos y agradeció, visiblemente emocionado, a su público incondicional. No hubo ceremonia, no hubo despedida. Todo en suspenso. Alcaraz podrá impedir que el tenista Nadal se haya terminado para siempre.