A Rafael Nadal no le alcanzaba con ser el rey de Francia, el rey de la tierra, el rey del tenis: ahora es también marqués.
La decisión no fue suya, sino del rey Felipe VI de España, que le otorgó este jueves el marquesado de Llevant de Mallorca, que se extiende a su esposa e hijos y es hereditario.
Nadal, de 39 años, vivió toda su vida en Mallorca, y recibió el marquesado junto a otras cinco figuras de la vida española. Fue la última de las decisiones de Felipe VI en la celebración de su décimo aniversario como rey.
“Sus respectivas trayectorias son exponentes de la excelencia, ya sea al servicio de la Corona o en el ámbito del pensamiento, la cultura, la ciencia, las artes y el deporte”, dijo la Casa Real española.
El título nobiliario no le confiere a Nadal ningún tipo de privilegio, pero sí es una muestra de lo que representa su figura para los españoles. Muy especialmente para el rey Felipe, que como deportista olímpico que fue -en vela- tiene especial admiración por los logros del 14 veces campeón de Roland Garros.
Nadal puede así contraponer su título de marqués al de “Sir” que ostenta su amigo y otrora rival Andy Murray.
El británico fue declarado caballero por la reina Isabel II tras un 2016 en el que ganó por segunda vez Wimbledon y el oro olímpico. La ceremonia se celebró en 2019 en el Palacio de Buckingham.
Mientras que Juan Carlos I, su padre y anterior rey, otorgó 55 marquesados en casi cuatro décadas de reinado, estos seis reconocimientos son los primeros que entrega Felipe VI desde que el 19 de junio de 2014 se convirtió en rey y jefe de Estado de España.
El honor le llega a Nadal un mes después de haber sido homenajeado en Roland Garros y a pocas semanas de convertirse en padre por segunda vez.