PARÍS – A Federico Gómez, las palabras de Novak Djokovic le están haciendo especial sentido en el momento más dulce de su carrera tenística.
«Como dijo Djokovic, siempre hay luz al final del túnel», recordó en una conferencia de prensa en París que tuvo un sabor distinto. Estaba frente a los micrófonos luego de su primer triunfo en un Grand Slam, refiriéndose con alegría a su victoria y a cómo le está ganando a sus propios demonios después de hacer públicos sus problemas de salud mental y sus pensamientos suicidas.
El argentino aprovecho la amplificación mediática que tienen los torneos Grand Slams para dar un consejo a los jóvenes tenistas que están pasando por momentos oscuros dentro de su cabeza.
“Que se abran de la manera que puedan, obviamente no están solos. Hay muchas formas de abrirse buscando ayuda. Que se sientan tranquilos, todo va a estar bien», reflexionó.
«Estoy contento de poder ayudar a otros jugadores o a otras personas que quizás se sientan en esa situación de malestar y de inseguridad. Expresarlo y contarle a la gente quizás no es una solución, pero sí es el cimiento de una casa, o las raíces de un árbol. Es una buena base para trabajar desde ahí».
A través de sus redes sociales en marzo, Gómez confesó que estaba atravesando por el momento más duro de su vida.
«Convivir con pensamientos de dejar el tenis por completo, de realmente cuestionarme si todo esto realmente vale la pena y hasta incluso en reiteradas ocasiones pensamientos suicidas de no querer vivir más y dejar este mundo», escribió el argentino el 2 de marzo de 2025 en su cuenta de Instagram @fedegomez250
El triunfo por 4-6, 6-4, 6-4 y 6-1 ante el estadounidense Aleksandar Kovacevic en la primera ronda del Abierto de Francia, es para Gómez un premio al esfuerzo después de todo lo vivido.
Hace doce meses estaba en Francia jugando un torneo ITF, lejos aún del sueño de poder disfrutar de una segunda ronda en Roland Garros.
«Cuando reflexiono con que hace un año estaba jugando un 25 mil acá en Francia, a unas horas de París…ahora estoy en segunda de Roland Garros. Es muy bonito poder estar acá», dijo el argentino.
De hecho, después de ganar el ITF de Carnac en junio de 2025 en singles y dobles, Gómez viajó unas horas hacia París a ver jugar a su amigo Francisco Cerúndolo en los octavos de final del Abierto de Francia contra Djokovic. París le tenía reservada otra historia en la edición siguiente.
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En el torneo al que entró como Lucky Loser, Djokovic lo llamó para entrenar con él. Algo que ya se hace costumbre, luego de que el ex número uno del mundo lo invitara a una de sus prácticas en el Masters 1000 de Miami, pocos días después de su dolorosa publicación.
“Esta vez fue un entrenamiento para los dos, porque ambos estábamos preparando la primera ronda. En Miami yo no jugaba, la práctica fue amoldada a lo que él necesitaba», dijo.
«Como siempre él fue una gran persona, un gran compañero que está atento cuando nos cruzamos en el vestuario, en la sala que tenemos en común los jugadores y lleva a eso, a sentirse cómodo conmigo, yo me siento muy cómodo con él, con su apoyo, con su equipo. No se podía pedir un mejor entrenamiento para jugar un cuadro principal de Grand Slam”
Federico Gómez enfrentará al británico Cameron Norrie este jueves, buscando el pase a la tercera ronda de Roland Garros.
