MADRID – Tardó en llegar, pero llegó: el noruego Casper Ruud desbloqueo un nuevo nivel al ganar el torneo de Madrid, el primer Masters 1000 de su carrera.
Ruud se impuso 7-5, 3-6 y 6-4 al británico Jack Draper, en una intensa final de dos horas y 29 minutos en la capital española.
En una muy fresca tarde de primavera en Madrid, Ruud y Draper le dieron todo el sentido al gasto que implica una entrada para un torneo de la envergadura del español: cada punto era una batalla, en cada pelota ponían la vida. Daba gusto ver a dos jugadores tan consistentes y tan cerebral y físicamente implicados en encontrar el lado débil del adversario.
Draper, que vive el mejor momento de su carrera, impresionó con la potencia de su derecha y la habilidad para aprovechar su zurda, sacar al ángulo abierto y desacomodar a su adversario. Pero Ruud sigue siendo Ruud, una máquina de devolver los tiros. aunque con una actitud sorprendente sobre la arcilla de Madrid. Es como si a los 25 años se hubiera convencido al fin del muy buen tenista que es.
Ruud había encadenado entre 2022 y 2024 seis finales y seis derrotas entre torneos de Grand Slam y Masters 1000. El noruego, que había salido del «top ten», será desde este lunes el número cinco del mundo, una posición más acorde con su categoría de finalista de tres torneos de Grand Slam. Esa es, precisamente, la nueva categoría que buscará ahora desbloquear: la de conquistar uno de los cuatro grandes.
