NUEVA YORK – Carlos Alcaraz es una de las estrellas que sufre con una costumbre tan puramente estadounidense: el aire acondicionado a toda potencia.
«¡Qué frío que hace acá!», dice el campeón del US Open 2022. La congelada sala de conferencias, que hasta obliga a la mujer encargada de transcribir lo que los protagonistas dicen, a usar chaqueta y bufanda, contrasta con el calor que se vivió en la pista de ese mismo recinto minutos atrás, donde el español avanzó a segunda ronda del último Grand Slam del año con victoria en cuatro sets frente al australiano Li Tu.
Todavía nadie, ni periodistas ni jugadores, ha podido resolver el misterio de por qué en ese cuarto la temperatura es tan baja. Para lo que sí tiene respuesta Alcaraz, es para determinar una cosa que acaba siendo muy beneficiosa para su tenis: el golf.
Salir por la cancha de césped de 18 hoyos e impactar una pelota quieta, mucho más pequeña que la de tenis, con palos en vez de raquetas, y a un ritmo diametralmente diferente, es para el número tres del mundo, una ventana. Un bálsamo para la cabeza cuando el tenis enreda.
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«Hace un tiempo ya que queríamos jugar con Casper (Ruud) y por fin lo concretamos«, cuenta Alcaraz. Ambos finalistas en Flushing Meadows en 2022 se dieron el gusto de jugar una ronda, que ganó el noruego, antes del arranque del torneo neoyorquino. Una instancia necesaria para rendir luego con la raqueta.
«Hablamos mucho sobre lo bueno que es el golf para nosotros, para nuestra mente, solo para desconectar y apagar nuestra cabeza. Eso ayuda para luego ser mejor en los torneos», explica el español.
«No podemos pensar 24 horas al día en tenis, siete días a la semana… Tienes que tener tu vida también, poder hacer otras cosas. Hay que pensar en otras cosas para luego rendir al 100%, ser mejor en la cancha y sentirse mejor. Nos ayuda a pensar más claro», añade.
El récord es de McEnroe
Los números y las estadísticas motivan a Alcaraz. La victoria ante el australiano fue la número 60 en Grand Slams. Un reportero le reveló que solo hay un tenista que alcanzó esa cifra de victorias en menos partidos que él: John Mcenroe.
«¡Qué pena que por un partido me haya ganado McEnroe! La verdad que para mí es un honor poder ir compartiendo este tipo de estadísticas con grandes leyendas del deporte. Ahora 60, pues ya queremos ir a 70 y cuando llegue a 70, pues a por las 80, ¿no?», apuesta.
También con los títulos en Roland Garros y Wimbledon, el medallista de plata en Paris 2024 estiró a 15 las victorias consecutivas en torneos grandes. Su última derrota fue ante Alexander Zverev en los cuartos de final del Abierto de Australia.
«Voy a intentar que la racha siga subiendo».
