Novak Djokovic llegó fresco a Turín y la buenos momentos lo acompañan: debut ganador en el Torneo de Maestros, y el permiso para disputar el Abierto de Australia en Melbourne.

El ganador de 21 Grand Slams, quien está por acabar una de las temporadas más extrañas para un tenista en lo que cuenta la historia, venció por 6-4 y 7-6 (7-4) a Stefanos Tsitsipas con la energía de un jugador que recién compite a mitad de año.

Luego, The Guardian informó que al serbio el gobierno australiano le concederá una visa para poder disputar el primer Grand Slam del año, que Djokovic ha ganado 9 veces. En enero de 2022, tras el escándalo de su deportación, el tenista fue prohibido de ingresar a Australia por tres años. La medida impuesta por el gobierno anterior, será revocada por el actual ministro de inmigración, Andrew Giles.

Djokovic perdió la batalla judicial en Australia y fue deportado en enero de 2022. Volverá a jugar en Melbourne en 2023.

Sin vacuna contra el Covid-19, en 2022 Djokovic no pudo jugar en Melbourne ni en Estados Unidos, y ganó el único Grand Slam que no dio puntos para el ránking: por la guerra en Ucrania, Wimbledon prohibió jugar a los rusos y bielorrusos, y la ATP respondió a la medida quitando la entrega de puntos en Londres.

Pero se cerró el techo y Djokovic pisó el acelerador con una actitud hambrienta. Con soltura y abundancia, en el comienzo de la gira indoor arrasó en Tel Aviv (ATP 250) y Astana (500). Sin Shanghai por razones sanitarias (otra rareza del año), hizo final en París Bercy, frenado por un Holger Rune, que a sus 19 años jugó el mejor partido de su vida, el del despegue. Lo mínimo que hay que hacer si se quiere vencer a Djokovic.

Meses exitosos para el serbio, favorito absoluto para ser el campeón en las Finales, donde ganó el último de cinco títulos en 2015. Un dato alucinante y demoledor: con la victoria de este lunes, Djokovic sumó 42 triunfos en el torneo; los otros siete competidores acumulan 41.

Desde Murcia de seguro hubo aunque sea una pizca de alegría, porque el griego amenazaba con quitarle a Carlos Alcaraz -ausente por lesión el premio del número uno del mundo en 2022, aunque para eso tenía que levantar el trofeo de manera invita. Aún puede repetir su título de 2019, pero la cima para él y su novela griega deberá espera.

Con Tsisipas fuera de esa carrera, la disputa queda entre españoles. ¿Alcaraz celebrará con su gente en el sureste de España? Tendrá que verlo a Nadal perder este martes ante Félix Aliassime, el jueves frente a Ruud, o bien que el tenista de 36 años siga sin pagar su deuda más grande: nunca fue campeón en el evento de cierre de año.

Alcaraz o Nadal. Uno de ellos finalizará el año como líder del ránking ATP

A propósito del partido entre el canadiense y Nadal, Toni Nadal, asesor técnico del norteamericano dijo en declaraciones al diario Marca que esta vez sí estaré en el box de Aliassime: «No voy a decir quién quiero que gane, pero me sentaré en el banquillo de Aliassime. En Roland Garros era diferente porque también se enfrentaban por primera vez y en Roland Garros hay algo más. Aquí no pasa nada, lo que seguro que no voy a hacer es celebrar ningún punto”.

En mayo, el tío y mentor de Nadal había confesado a CLAY que no daría una pizca de consejo a su actual cliente para que usara en contra de su sobrino. Algo que a pesar de que estuvo acordado previamente entre ambas partes, levantó polémica en el mundo del tenis.

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