LONDRES – Carlos Alcaraz no toma demasiado en serio a Nick Kyrgios. Aunque quizás debería, porque el australiano, habló de un tema del que es experto: los peligros de la noche.
“Son comentarios graciosos, yo me río con lo que dice”, comentó en Londres el tenista que va camino al tricampeonato en Wimbledon.
¿Qué dijo Kyrgios?
Que su gran rival, el italiano Jannik Sinner, tendrá una carrera más exitosa que el español. ¿Por qué?
“Porque Alcaraz ama a las chicas”.
En el programa de Youtube de la liga UTS, conversando con el coach francés Patrick Mouratoglou, Kyrgios opinó sin censura y sabiendo de lo que habla: “Puede que Alcaraz se distraiga, que salga demasiado de fiesta. En cambio, Sinner seguirá completamente concentrado”.
¿Debe considerar el español los comentarios de un experto como Kyrgios?
Después de recibir la pregunta, el bicampeón en el All England Club se rió. Y a lo largo de su respuesta, miró varias veces hacia donde estaba sentado su manager. Estaba preparado para recoger los comentarios del australiano.
“No, obviamente son comentarios graciosos que viniendo de Kyrgios no me sorprende nada. Pero bueno, al final cada uno tiene su punto de vista. Es algo que no es ningún secreto”, replicó Alcaraz con una gran sonrisa.
Y ahí desarrolló una comparación con su mayor rival con un poco más de profundidad: “Obviamente hemos visto que Jannik siempre tiene menos altibajos que yo. Yo siempre he dicho que es algo que vengo trabajando. Jannik no tiene altibajos, siempre juega un muy buen tenis desde el principio hasta el final y a mí me cuesta un poco. No tiene nada que ver con lo de la noche, aunque obviamente me gusta disfrutar”.
Relegado a la posición de comentarista sin poder competir debido a sus lesiones, Kyrgios añadió que cree que la super estrella del tenis mundial “sabe en el fondo” que disfruta de manera especial los beneficios de ser uno de los mejores atletas del mundo.

Kyrgios lo dijo en Talk Sport: “Quizás mis comentarios suenen un poco exagerados, pero no estoy mintiendo. Alcaraz, en el fondo, sabe que le gusta la fiesta, le gustan las chicas. Esa es su personalidad. Pero hace un gran trabajo encontrando el equilibrio, quizás donde yo no lo encontré al comienzo de mi carrera. Es un gran personaje y una gran personalidad”.
El australiano vivió años de mucho descontrol durante su tiempo en el tour. Precisamente su historia más célebre ocurrió a algunas cuadras del All England Club, en el Wimbledon Village.
En 2019, la noche antes de jugar contra Rafael Nadal en el Court Central por la segunda ronda del torneo, su manager y cuñado, el australiano Daniel Horsfall tuvo que sacarlo del famoso bar Dog & Fox, donde estuvo bebiendo hasta las cuatro de la mañana”.